El hojaldre con chistorra es uno de esos aperitivos que se pueden preparar tan fácilmente y ser tan resultones que pensarás ¿Cómo no los he preparado antes?
Receta de hojaldre con chistorra
En cualquier carnicería o en el supermercado encontraréis chistorra, lo ideal es que optéis por una que os guste y que sea de buena calidad. Si no lo conocéis, la chistorra es un tipo de embutido que se prepara con carne picada fresca de cerdo y que tiene su origen en Navarra. Se suele utilizar en variedad de platos, como el hojaldre con chistorra que os proponemos en esta receta, los huevos rotos con chistorra, lentejas con chistorra, entre tantos otros.
Hojaldre con chistorra – Ingredientes
- 1 lámina de hojaldre
- 200 gr. de Chistorra
- 1 huevo
- Semillas (puede ser sésamo tostado, amapolas, etc.)
Cómo hacer hojaldre con chistorra
Divide la lámina de hojaldre en tres columnas diferentes.
Corta la chistorra de tal forma que coincida con el largo del hojaldre y la extiendes sobre cada una de las columnas, como en tres piezas separadas y diferenciadas.
Pon la chistorra en un lateral del hojaldre y la enrollas.
Con un cuchillo bien afilado y con cuidado, ve cortando el hojaldre con la chistorra en trocitos o pequeñas porciones. El tamaño de las mismas va a depender de vuestro gusto, podéis hacerlos grandes o pequeños. En mi caso, os propongo que sean como los de la foto para que puedan ser de un único bocado y evitar mancharos con la grasilla de la chistorra al darle un mordisco.
Ve colocando cada una de estos hojaldritos sobre una fuente apta para el horno y previamente forrada con papel vegetal o papel de horno.
Bate un huevo y pincelas cada hojaldrito, tanto la parte superior como los laterales. A continuación, echas unas semillas por encima si quieres, esto es totalmente opcional. Nosotros hemos puesto un poco de sésamo tostado.
Introdúcelo en el horno a 200º durante unos 20 minutos. Hay que prestar atención a que el hojaldre no se queme y, en cuanto esté listo, lo retiras y sirves.
Si ves que ha soltado mucha grasa, puedes pasarlo un instante sobre un plato con papel de cocina absorbente para que no quede muy graso.
¡A disfrutar!
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