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Bebidas
¡Listo en 5 minutos! El refresco de verano saludable que solo necesita una fruta
Olvídate de tanto refresco súper azucarado de supermercado y prepara un rico refresco de frambuesa saludable, ideal para el verano, para tu día a día o tus días más especiales.
Receta de refresco de frambuesa saludable
Los refrescos de supermercado a los que todos estamos habituados están llenos de azúcares o edulcorantes de los que la OMS ya ha emitido un aviso sobre su efecto para la salud. Entonces, ¿Por qué no habituarnos a preparar impresionantes refrescos caseros, sabrosos, aromáticos y bien fresquitos?
Con recetas como las que hoy te compartimos podrás ver que puedes conseguir algo saludable, refrescante y sin tener que dedicarle un tiempo excesivo. Este refresco de frambuesa lo puedes modificar a tu gusto, por ejemplo, puedes utilizar fresas (suelen ser más económicas), arándanos o incluso sandía. Esto ya va en cuestión de gustos.
El toque clave para este tipo de refrescos, que tengan ese punto refrescante y muy fresco, son la menta o la hierbabuena. Mi mejor consejo es que te hagas con una planta y la tengas en casa, verás cómo cambia el ambiente de tu hogar y el de tu cocina. Además, que te va a salir mejor que si vas comprando las hojas frescas.
Y si lo que más te gusta de los refrescos es el gas, puedes preparar este refresco saludable con agua con gas en lugar de de agua normal.
Ingredientes
- 150 gr Frambuesas
- 1/2 Limón
- Hielo
- Lima
- Hojas de menta o hierbabuena fresca
- 1 y 1/2 l de agua o agua con gas
- Endulzante al gusto
Preparación
Lo primero, lava la fruta escogida y lo pones en un colador para que pierda todo el agua sobrante.
Pon las frutas en una trituradora y añades el zumo de medio limón. Tritura hasta que esté totalmente hecho puré.
En una jarra pones el hielo (puede ser picado), añades el puré de frambuesa, unas rodajitas de lima (me gusta más que con las de limón, por ese toque dulcecito) y terminas por añadir unas hojas de menta o de hierbabuena.
Termina de llenar la jarra con el agua, remueve todo y lo tienes listo para servir.
Hay que servirlo bien fresquito para que el hielo no se deshaga y aumente el líquido del agua, lo que implicaría que baja el sabor afrutado.
Puedes ver la vídeo receta aquí:
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