Pan de hamburguesa casero

Hacer pan de hamburguesa casero es facilísimo, lleno de aromas y tan blandito que os encantará. También podéis darle forma de pan de perrito o podéis utilizarlo para otro tipo de rellenos.

Pan de hamburguesa casero

El pan de hamburguesa casero es tan sencillo de hacer que seguro que se acabará convirtiendo en uno de vuestros clásicos, pues solo tenéis que preparar los panes desde la mañana para poder tenerlos listos para la comida y ¡hola, hamburguesas impresionantes!

Pan de hamburguesa casero – Ingredientes

  • 250 harina panadero (harina del supermercado si no tenéis)
  • 1 + 1/2 cucharadita de mostaza antigua (opcional)
  • 250 gramos de harina de fuerza
  • 325 ml. de agua tibia
  • 80 gramos de mantequilla a temperatura ambiente
  • 25 gramos de leche en polvo
  • 3 gramos de levadura seca de panadero (10 gr. levadura fresca)
  • 10 gramos de sal
  • 10 gramos de azúcar
  • Semillas de amapola
  • Semillas de sésamo tostado

Cómo hacer pan de hamburguesa casero

En un recipiente alto pon todos los ingredientes que aparecen en la anterior sección. La mantequilla es importante que esté a temperatura ambiente para que pueda ser mezclada fácilmente.

Puedes amasar con el gancho de la batidora o puedes amasar directamente con las manos, trabajando la masa durante unos cuantos minutos hasta que obtengas una superficie lisa.

En ese momento, solo necesitas darle forma de bola y colocarla dentro de un recipiente. Tápalo con un paño y lo dejas fermentar durante 1 o 2 horas, hasta que aumente el doble de volumen. El tiempo de fermentación va a variar en función de la temperatura ambiente, si hay una temperatura externa más cálida, la fermentación irá más rápida.

Pasado este tiempo será el momento de extender la masa suavemente sobre una encimera sutilmente enharinada. Puedes darle forma de cilindro o de rollo y después lo cortas en ocho o seis porciones que sean del mismo tamaño, dentro de lo posible.

A continuación, tienes que darle forma de bola a cada una de ellas. Lo que tienes que hacer es llevar el exterior de la masa hacia el interior, después le das la vuelta y le vas dando forma de bola. Te dejo un vídeo para que lo veas de forma más sencilla.

Cuando los tengas todos los colocas sobre un papel de horno, los tapas de nuevo con un trapo y los dejas reposar hasta que doble el volumen.

Una vez que pase este tiempo solo tienes que pintarlos por fuera, puedes pincelarlos con un poco de agua, leche o huevo, y en seguida echas por encima las semillas de sésamo y semillas de amapola.

Después lo metes en el horno caliente a 200º durante unos 15 o 20 minutos, lo importante es que cuando los vayas a sacar del horno estén doraditos. Después solo tienes que colocar un paño por encima y los dejas así durante 15 minutos.

Posteriormente los dejas enfriar y a consumir cuando quieras.

¡A la rica hamburguesa, oiga!

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